"Mis días ya sé a dónde van,
Recuerdos negros ya no volverán, no se repetirán,
Tu estás aquí y eres mi guía,
Y ahora por fin pegada a ti, así quiero pasar mis días."
Recuerdos negros ya no volverán, no se repetirán,
Tu estás aquí y eres mi guía,
Y ahora por fin pegada a ti, así quiero pasar mis días."
Es increíble.
Es increíble cuando te levantas día tras día con la misma sensación de vacío, como te mueves por inercia un día sí y el otro también, repitiendo una y otra vez el patrón establecido, sin plantearte siquiera una alternativa a la monotonía.
Te acostumbras, e incluso tanta pasividad ante el paso de los días resulta atractiva. ¿Para qué cambiar tanta tranquilidad? ¿Para volver a obtener a cambio otro mar de lágrimas?
No, no merece la pena.
Y así sucedían los días, todo importaba demasiado poco como para hacer daño y provocar quebraderos de cabeza.
Una vida tranquila, sí, pero aburrida y vacía.
Y entonces, cuando el orden estaba establecido y no había nada de qué preocuparse en mi vida gris, aparece una persona sugiriéndote que te hagas un caldo con una pastilla de avecrem.
Es increíble como algo tan estúpido pudo marcar tanto mi vida. Pero así fue.
Y lo más increíble, fue como en tan solo un par de semanas esa persona fue adquiriendo importancia para mí. La forma en que rompió mis esquemas y la tranquilidad de mi día a día, poniendo mi vida patas arriba.
Fue increíble la confianza que me irradiaba, el cariño que me brindó y lo emocionante que fue ir conociendole. Había olvidado lo que se siente al pasar casi toda la noche en vela colgada del teléfono, pasar el día escribiendo mensajes y aprovechar cualquier oportunidad para verle.
No me hizo falta apenas un mes para darme cuenta de cuanto deseaba que ese personaje devolviese color a mi existencia gris.
Me envolvió en muestras de aprecio y lleno mi vida de alegría.
Compartió mis penas y mi amor por los animales.
Y a día de hoy lo sigue haciendo.
Quizá las cosas sucedieron demasiado rápido, simplemente fluyeron y no salieron nada mal.
No sé bien como lo hace para soportarme durante todo un año, solo espero que sea capaz de seguir haciéndolo y que, al igual que yo, sienta lo mismo que sentía hace un año cuando me ve venir desde lejos.
Gracias por este maravilloso año y por todas las sensaciones que me has regalado.
Te amo.
Hoy, mañana y siempre.
It was dark, and I was over,
until you kissed my lips and you saved me.